martes, 28 de agosto de 2012

#egov : Revisitando el concepto para asegurar su supervivencia


Leyendo la breve y recomendable estrategia de Gobierno Electrónico del Gobierno de Irlanda fui sorprendido por su anexo final. El anexo buscaba establecer una definición para el Gobierno Electrónico con el objetivo de acotar los proyectos que eran del ámbito de la estrategia. No creo que sea algo necesario, ya que la definición del concepto como "la inclusion de las TIC junto con nuevas capacidades en las AAPP para mejorar los servicios, apoyar las políticas públicas y reforzar los procesos democráticos" , sigue plenamente vigente.

Aunque la definición clásica de Gobierno Electrónico dada por la Comisión Europea siga siendo valida, es de reconocer que el concepto de qué es un proyecto de Gobierno Electrónico sólo se ha adaptado al mismo recientemente. Hacia el año 2000, cuando la definición fue dada, poco más que la puesta de procedimientos administrativos en Internet se consideraba un proyecto de Gobierno Electrónico. Consecuencia de esa aproximación primigenia son los mecanismos de evaluación del progreso del Gobierno Electrónico, y la segunda derivada de considerarlo un experimento fallido por su falta presunta falta de uso.

Sin embargo, el Gobierno Electrónico como proyecto va más allá, y precisamente es ahora cuando parece cuestionado que las Administraciones Públicas están pasando de creerse digitales a ser digitalesExiste más transformación digital en el proyecto de Gobierno Electrónico que no se ve la "marca" de la Administración que en la disponibilidad de cualquier procedimiento en línea. Pero este tipo de proyectos, quizás por ser los más exitosos, son los que más se cuestionan como proyectos de Gobierno Electrónico. Quizás no se más que la reivindicación de los premios por los no participantes.

Pongamos un ejemplo claro, ¿agradece mas el ciudadano el proyecto que le permite entregar la declaración del IRPF por Internet o el proyecto que le permite recibir un borrador de declaración de IRPF para entregarlo por el canal de su conveniencia? Aunque aparentemente sean parte del mismo lote, la simplificación administrativa derivada de no tener que ni recopilar los papeles relativos a tus ingresos es sin duda la parte más agradecida. Esa es la disrupción, y no la ventanilla automatizada. 

Este replanteamiento del Gobierno Electrónico tiene un claro vector impulsor: lo que la tecnología puede aportar ha sobrepasado las necesidades básicas del negocio. Sólo se nos pedía automatizar back-office y front-office, y eso, aunque mejorale como todo, está básicamente hecho en las grandes Administraciones. Lo que ofrecemos ahora, es adicional, y a veces considerado superfluo por el advenedizo digital en tiempos de restricciones. Hay quien me contó que en proceso de participación electrónica le despreciaron tomar las aportaciones ciudadanas en un sistema de gestión documental ya existente, que hubiera permitido búsquedas y clasificaciones posteriores que agilizaran tratamiento. Rechazo y petición de buzón mail fue lo que pidieron en cambio, para después ahogarse en las peticiones recibidas.

Lo que podíamos vender con el Gobierno Electrónico, está comprado.  Como concepto, como actividad dentro de las Administraciones Públicas, sólo sobrevivirá saliendo sus profesionales de la actitud pasiva de esperar peticiones, y, como el del caso descrito, proponiendo más allá de lo pedido, ofreciendo la transformación. La rechazaran uno y ciento, pero la razón y necesidad está de su parte.

lunes, 6 de agosto de 2012

¿Quieres libertad de expresión? Abre tu blog y gánatela

Uno tiene ya sus años, y se acuerda de cuando Boadella tuvo que salir perseguido de este país por haber puesto en escena una obra de teatro contra la pena de muerte.

Uno tiene ya sus años, y se acuerda de cuando los diarios molestos se cerraban sin más. Bastaba una orden del Ministerio de la Informacion para ello.

Uno tiene ya sus años, y se acuerda de cuando los Serrat se paso once meses exiliado por criticar los últimos fusilamientos del régimen fascista del General Franco.

Por estos casos, y alguno más que mi provecta edad me impide recordar, me da miedo ver que hay asociaciones a las que se amenaza por criticar al Gobierno o que se priman criterios partidistas para dirigir los informativos de un medio público.

Por ello, me uno a la campaña que ha iniciado Cesar Calderon.

Como diría Julio Anguita, "di a tus hijos que peleen, porque si no pelean no tienen derecho a nada".



sábado, 4 de agosto de 2012

#TIC en la AGE: El camino de la optimizacion es la organizacion y no la externalización

La Generalidad de Cataluña inició hace unos meses la implementación de un modelo "nuevo" de aprovisionamiento de servicios de TIC. Basado en el mecanismo de diálogo competitivo, estructuró su licitaciones en cuatro diálogos con varios lotes cada uno. Todo ello, fue presentado hacia finales del año pasado, pudiendo encontrarse toda la información al respecto en esta página.

He de reconocer que no había estudiado mucho el tema hasta ahora, en que fuí atraido por la fanfarria de la adjudicación de los dos primeros diálogos. A bombo y platillo se hablaban de unos ahorros de hasta el 25% -35% de los presupuestos TIC de la Generalidad gracias a este modelo de contratación.

Ni corto ni perezoso, empecé a buscar datos de aquí y allá para tratar de ver la aplicabilidad del modelo a la AGE.

Es importante comenzar por el principio. Una breve descripción del punto de partida radicalmente distinto.

La AGE se basa en un modelo de implementación descentralizado en cada Ministerio y organismo, de marcado carácter funcionarial con una moderada externalizacion, donde, de acuerdo al informe REINA en el año 2010 existian 13.814 empleados públicos cuya actividad laboral estaba relacionada con las TIC. Ello suponía aproximadamente el 2,40% del personal de la AGE.

La Generalidad se basa por su parte en un modelo de implementación centralizado alrededor del CTTI, que facilita servicios TIC a las distintas consejerias y organismos y apoyado en una alta externalizacion. El CTTI son 335 personas en 2012, lo que equivale aproximadamente a un 0,02% del personal al servicio de la Generalidad según el informe del personal al servicio de las Administraciones Públicas 2011 (reconozco que aquí mezclo datos de varios años, pero no es significativo).

Los datos dados por la Generalidad en la presentación de los diálogos competitivos y el informe REINA antes mencionado, nos sirve para comparar ambos modelos antes del cambio en la Generalidad.

De un lado, en la AGE en 2010 el presupuesto TIC (capítulos 1, 2 y 6) supusieron 1.752 millones, lo que equivalía a un 3,77% del presupuesto AGE (capitulos 1, 2 y 6). De otro lado, en la Generalidad en 2010 el presupuesto TIC supuso 600 millones (supongo que capítulos 1, 2 y 6), lo que equivale a un  7% del presupuesto de la Generalidad (capítulos 1, 2 y 6).

Podemos por tanto sacar ya dos conclusiones:
a) La centralización no supone un factor de optimización del presupuesto TIC, ya que en la AGE (descentralizado) se hace uso de un presupuesto porcentualmente inferior
b) El uso de un mayor número de empleados públicos en la provisión de los servicios TIC no es un factor de ineficiencia, ya que en la AGE esta es la situación y se hace uso de un presupuesto porcentualmente inferior

Por tanto, la aplicación del modelo en la AGE debería contar conque los ahorros a buscar han de ser menores, por contar ya con un mayor grado de optimización, y apoyarse en la presencia de una mayor internalización. ¿Pero es necesario aplicar diálogos competitivos en AGE  o son otras las medidas a tomar?

Pues me inclino por lo segundo. Los supuestos ahorros en la Generalidad han sido de hecho ya aplicados en la AGE (los presupuestos este año se han reducido manu militari en más del 35% en la mayoría de las unidades de la AGE) y van a intensificarse los ahorros en 2013. Una flexibilidad de ahorro que no va a poder aplicarse ya en la Generalidad (existirá el contrato de los diálogos) y que implicará que el porcentaje de gasto TIC sobre el total del presupuesto vuelva al punto de partida. Es decir, la optimización de presupuesto que alcanza la Generalidad con el diálogo competitivo ha sido ya alcanzada en la AGE sin usar el mecanismo, y además permitirá mayot ahorro si se sigue sin aplicarlo.

¿Cuáles son las otras medidas? No parece factible optimizar la cantidad, pero si cómo la usamos. El optimizar como se usa una cantidad, solo tiene un camino: Los cambios organizativos. Es necesario una reforma profunda de como estamos organizados en la AGE en las TIC. Algo que podemos materializar en la creación de un CIO (o como queramos llamar a un máximo responsable TIC  en la AGE) que gestione fundamentalmente todo aquello común, pero dejando autonomía a los Ministerios y organismos en los aspectos sectoriales.  Todo ello apoyado en el ya existente personal público que presta el servicio TIC.


El camino en la AGE no es la externalización, sino la reforma organizativa. Lo contrario no serían recortes, sería ideología.




miércoles, 1 de agosto de 2012

#Coworking en #aapp


En más de una ocasión, me he mostrado en esta bitácora a favor del teletrabajo en las Administraciones Públicas. Creo que su implantación conllevaría 
  • la introducción de una mayor eficiencia energética social, al reducir el número de desplazamientos de personas 
  • una mayor eficiencia del sector público, al estar intrínsecamente ligado a un sistema de evaluación por objetivos
  • reducción de costes de servicio, mediante la eliminación de espacios físicos y sus costes inmobiliarios
Sin embargo, siempre me había parecido que bajo estas mejoras de eficiencia latía el riesgo de un progresivo aislamiento de los empleados públicos, que a la larga podría traer una caída de los parámetros de calidad de servicio. Quizás un medio para contrarrestar este riesgo, e incluso obtener réditos en los campos de innovación pública, es combinar el teletrabajo con el coworking.

Para el que lo desconozca, la Wikipedia define el coworking como

El coworking (cotrabajo) es una manera de trabajar que permite que varios profesionales independientes de sectores distintos compartan una misma oficina o un mismo espacio de trabajo (con características similares a las de un café) donde se fomenta la colaboración, el trabajo en un espacio comunitario y multidisciplinario, y el networking.


Llevémoslo a lo público en un ambiente de teletrabajo. Imaginemos que combinamos la consolidación de espacios físicos con una reordenación radical de los resultantes. Un teletrabajador siempre va a necesitar ocasionalmente un espacio físico en su entidad, discontinuo y utilizado también por otros teletrabajadores. Aprovechar esos espacios como ámbitos de colaboración en que convivan empleaos públicos de distintas unidades administrativas, o incluso personal de empresa privadas, puede hacer de los mismos lugar de nacimiento de sinergías, de creación de nuevos servicios mas efectivos y detección de demanda.