Llevo ya leídas más de una lectura de
estrategias de Gobierno Electrónico. Son lecturas ya faciles para quien está acostumbrado, de
formato poco variable: Definición de una serie de prioridades y dependientes de las mismas una serie de acciones a realizar para alcanzar una serie de objetivos. Pueden existir adornos, como la definición o no de planificaciones asociadas, pero existe poca desviación al respecto. Siempre excita encontrar aproximaciones distintas, tales como la de
"Rethinking Online" del Gobierno de Nueva Zelanda. En lugar de definir qué es lo que se espera de los distintos Ministerios y organismos públicos, se concentra en el cambio de cultura, en cómo hay que hacerlo, definiendo para ello una serie de principios de actuación que deben dar lugar a unos resultados, apoyadas sobre cambios en la gobernanza de las infraestructuras y servicios de Gobierno Electrónico y la construcción de un registro de medios electrónicos.
Los principios de actuación que deben dar lugar al cambio de cultura son:
1st principle: Coordinate how online is managed across government
1. Set up effective cross-agency planning for online delivery
2. Have a single point of contact and responsibility for online in every agency
3. Measure and report the business value and quality of online channels
2nd principle: Share capability and adopt common approaches
4. Concentrate skill in centres of expertise, for use by all agencies
5. Share technology components, designs and contracts across government
3rd principle: Design and deliver around people’s needs
6. Cluster online information and services around shared topics and audiences, not agencies
7. Bring all ‘government to government’ information and online tools together
4th principle: Partner outside of government for better online delivery
8. Open up access to information, non-personal data and services
9. Partner with third parties and communities for effective government online delivery
Cuya aplicación debe tener como resultado enriquecer la experiencia del usuario con los servicios de Gobierno Electrónico, ganacia en la eficiencia económica en el uso de recursos y mejora de la agilidad estratégica.
Para velar por el efectivo cambio de cultura, la estrategia se centra en una definición del modelo de gobernanza. En el mismo, la figura de un grupo de Planificación no sólo tiene el cometido de evaluar proyectos para su ejecución de un modo aislado, sino buscar de modo activo una sinergia e incentivar las oportunidades de colaboración entre Ministerios y organismos. La herramienta clave para ello es un Registro de Medios Electrónicos, donde registrar el público destino de los servicios, tecnologías usadas, coste de desarrollo y mantenimiento, y otros datos clave que permiten ver como aunar esfuerzos de recursos o identificar oportunidades de servir a los ciudadanos desde un punto de vista más holístico. En los Ministerios y organismos, define una bicefalía de interlocución/responsabilidad, con dos figuras diferenciadas, orientada una a servicio en línea y otra a tecnología que han de tener también un rol activo en las búsqueda de sinergias en cada ámbito con otros Ministerios y organismos o terceros actores (ONG, privado, ...).
Además del Registro de Medios Electrónicos, el grupo de planificación cuenta con otros instrumentos. La definición de Centros de Competencia en un Organismo determinado y el manejo de las cesiones de personal (comisiones de servicio) entre ellos para el desarrollo de proyectos, son algunas de las que se vislumbran. No obstante, como en todo documento estratégico, no termina de perfilarse el grado taxativo de los mismos.
Quizás la única carencia del documento es el perfilado de un mecanismo de evaluación del papel del cada actor en el cambio cultural, que sirva de acicate e incentivo a su desarrollo efectivo.
En definitiva, el documento es una muestra de innovación en la planificación estratégica del Gobierno Electrónico.